Etiquetas

, ,

He sembrado mi semilla a través del corazón.
Ahora acepto la poesía de la sangre cuando es tibia.
¿Cuál, de todas mis heridas,
querrías que te regalara?
Si, como la tormenta, soy capaz de todo.
Y el día propone a la noche una última función.

Encontré una isla sumergida en tus brazos.
Y me dejas fuera,
y tropiezo en cada esquina.
Pero antes de que viajes hasta la inconsciencia
quisiera otro beso.
Aunque no sepa volar.

(Última función, agosto 1997)